COMPRENDE EL EMBUDO DE CONVERSIÓN CON UN EJEMPLO
Todas las marcas y empresas tienen como objetivo final vender y hacerlo a través de la web es algo cada vez más habitual y a lo que se dedican más atenciones y esfuerzos. Sin embargo, montar una web o un e-commerce no te garantiza el éxito, no vale con crear la página y dejarla funcionar a su libre albredrío. Para alcanzar los objetivos de ventas es necesario un estudio constante e introducir periodicamente mejoras.
E l “embudo de conversión” es uno de esos conceptos imprescindibles con los que hay que trabajar para convertir los esfuerzos en clientes finales. Conocer cada una de las etapas por las que pasan los usuarios y tomar las medidas oportunas en cada una de esas fases te ayudará a obtener más conversiones y, en definitiva, más ventas. Te mostramos cómo hacerlo.
¿Sabes qué es un funnel o embudo de conversión?
En primer lugar debemos determinar qué es con exactitud el funnel o embudo de conversión en el mundo de las ventas online. ¿Te suena? Seguro que ya has oído alguna vez este concepto. Se trata de un esquema simplificado que permite analizar, explicar y mejorar las diferentes etapas del proceso de compra por Internet. Es una herramienta muy útil que los equipos de ventas y marketing utilizan para ilustrar los pasos del recorrido del cliente. Visualizar ese trayecto que hace un usuario desde que descubre una marca hasta que compra el producto, es muy importante de cara a tomar decisiones pero para ello es necesario registrar cada una de las interacciones del posible cliente.
Del mismo modo que el usuario obtiene información de tu marca al visitar tu web, tú puedes conseguir datos sobre él que te ayuden a personalizar el proceso y, en consecuencia, a enriquecer la experiencia del cliente.
Dicho de otra manera, en lugar de dejar que el usuario navegue sin rumbo por tu web, hay que guiarlo y sabér en cada momento dónde está para ofrecerle atención personalizada y conseguir al fin un cliente fiel que compre más de una vez y nos recomiende al resto de usuarios.
Tipos de embudo de conversión.
Los funnels o embudos de conversión pueden ser diferentes y variados pero los más comunes son estos:
Funnel de captación de leads.
Un lead es un cliente potencial, con lo que este embudo lo que pretende es conseguir convertir un visitante de una web en un potencial comprador. Para ello basta con obtener datos personales de ese visitante puntual, algo que suele lograrse a través de un regalo o incentivo (un recurso gratuito de valor como un ebook por ejemplo).
El usuario llegaría a nuestra web a través de buscadores, redes sociales, etc. En la landing page de captación se le ofrecería descargar el recurso de valor gratuito en cuestión, para poder descargarlo nos facilitaría sus datos (nombre, apellidos, email…) y recibiría un correo donde le daríamos las gracias, el contenido y las instrucciones de descarga. Rápido, sencillo y eficaz.
Funnel de cultivo de leads.
El objetivo de este funnel es mejorar la relación con los clientes potenciales, impulsarles a la compra, aumentando su interés y ofreciéndoles valor antes de la venta.
Es de vital importancia etiquetar a los leads según las diferentes acciones de marketing que ya han realizado como abrir un email, clicar sobre él, visitar una web, etc. De este modo, conoceremos en cada momento sus intereses y les podremos ofrecer contenido personalizado que les haga sentir únicos e importantes.
Funnel de ventas.
El funnel de ventas online tiene el objetivo de convertir contactos en clientes a través de la compra de un producto o servicio. Lo más adecuado es que los usuarios que entran en este embudo sean personas que ya han mostrado interés antes habiendo pasado previamente por el funnel de cultivo de leads.
Netflix un claro ejemplo de funnel de éxito.
Este archiconocido servicio de streaming que funciona mediante suscripción y permite ver series y películas a través de cualquier dispositivo conectado a Internet, es un buen ejemplo de funnel de conversión de ventas que funciona. De hecho, el modelo de embudo de Netflix se ha convertido en fuente de inspiración para numerosas marcas y webs. Su rasgo más característico es la simplicidad, sin elementos que lleven a la confusión y donde el usuario sabe perfectamente qué va a obtener en cada momento. Los principales elementos del funnel de Netflix son los siguientes:
Captación de tráfico: aunque Netflix es una marca muy potente y no necesita gran inversión en promoción sí que se esfuerza en conseguir tráfico online ya sea a través del email marketing, campañas de TV y, sobre todo, capatación a través de RRSS.
Una página de inicio potente: en ella se muestran las últimas novedades audiovisuales y se hace hincapié en la prueba gratuita y sin compromiso que es su mayor argumento de venta. El diseño a modo de línea de tiempo o barra de progreso hace que el usuario conozca donde está siempre sin temor a equivocarse y sabiendo que puede ir hacia atrás cuando quiera.
Apartado de precios: en este apartado se emplea un esquema sencillo donde se explican claramente las diferentes opciones de suscripción. El plan Premium está seleccionado por defecto, con lo que habrá que elegir a posta otro para cambiarlo.
Página de registro: el lugar donde el lead deja todos sus datos de interés para la empresa.
Información de pago: aquí el usuario puede pagar mediante tarjeta de crédito (la inmensa mayoría de tarjetas son aceptadas) o mediante otras opciones como PayPal o la tarjeta regalo (algo muy útil). Se pone énfasis en la seguridad de los datos para incrementar la confianza del usuario.
La clave del éxito del funnel de ventas de Netflix está en enfocarse por completo en el consumidor, dando la información justa y necesaria de forma clara, facilitando al máximo cada paso y generando mucha confianza (gracias al poder de la propia marca, a disponer de un número de teléfono de contacto y a poder volver hacia atrás y editar la información en todo momento).
Vista la importancia de crear embudos de conversión ¿te animas a crear el tuyo propio y conseguir que tu tienda online venda de verdad?