Nuestra producción de datos ha crecido exponencialmente y muy rápido en los últimos años. Cada vez contamos con más información y por esto son necesarias herramientas que analicen y procesen los datos relevantes y discrimininen los que no lo son tanto. El Big Data ha llegado aquí para quedarse y va a condicionarnos a todos como individuos así como a nuestras relaciones con el entorno. Al tiempo, ofrece muchas posibilidades para mejorar el rendimiento de negocios y empresas… ¿Quieres saber cómo?
¿Qué es el Big Data?
Big Data es un término que describe el gran volúmen de datos, tanto estructurados como no estructurados, que inundan los negocios cada día. Pero, como decíamos en la introducción, lo importante no es tanto la cantidad de los datos como lo que las empresas y organizaciones hacen con ellos.
Te dirás que siempre han existido las bases de datos que almacenaban mucha información, pero la diferencia o el salto al Big Data se da cuando se cumplen estas características: el conjunto de datos o las combinaciones de conjuntos de datos tienen un volúmen o tamaño excepcional, su complejidad es enorme y la velocidad de crecimiento es tal que se dificulta su captura. Utilizar en estos casos métodos de gestión o procesamiento de análisis convencionales como bases de datos, estadísticas o paquetes de visualización es a todas luces insuficiente.
Además, el ritmo de crecimiento de la información no para sino que va en aumento cada día por lo que comenzar a utilizar tecnologías capaces de procesar todos esos datos y discernir los que son relevantes se hace imprescindible. Un dato: en los últimos cinco años se ha generado más información científica que en toda la historia de la Humanidad. ¿Te haces ahora a la idea del ritmo en el que está multiplicándose la información de la que disponemos?
Tipos de datos.
En cuanto a las características de la información que se utiliza en el Big Data, existen dos clases fundamentales: los datos estructurados y los no estructurados.
Datos estructurados: se trata de la información de bases de datos relacionales. El formato más común son las tablas o las hojas de cálculo. Estos datos se gestionan utilizando el lenguaje de programación SQL (Structured Query Language).
Datos no estructurados: son generalmente binarios y no poseen una estructura interna identificable. Este tipo de información suele acumularse en una base de datos no relacional (NoSQL). Su origen puede ser muy variado:
- Documentos
- Correos electrónicos.
- Información proveniente de aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp, por ejemplo.
- Vídeos y audios.
- Publicaciones de RRSS como Facebook, LinkedIn o Instagram.
Existe una tercera categoría de datos que son los semiestructurados, es decir, fuentes o documentos que internamente tienen cierto nivel de organización y jerarquía, aunque no siguen una estructura estandarizada.
Analítica de datos: porqué es importante para tu negocio
¿Para qué sirve el Big Data en el entorno empresarial? ¿qué puede hacer por tu negocio/marca? Y sobre todo, ¿cómo puedes aprovechar al máximo su potencial? Pues bien, en primer lugar, una buena infraestructura de datos te va a permitir acceder a la información de la empresa de forma eficiente. Por supuesto también vas a poder buscar soluciones a las necesidades de tu organización mucho más rápido. Te resumimos algunos de los beneficios del análisis de datos:
- Podrás tomar mejores deciones. Cualquier negocio con página web, presencia en RRSS o que acepta pagos electrónicos tiene datos de los clientes, la experiencia del usuario, el tráfico web, etc. Analizar estos datos te ayuda a encontrar información vital que puedes usar para mejorar tu empresa.
- Los datos te ayudan a resolver problemas. Podrás identificar qué ha salido mal en tus distintas campañas, comprender mejor cada parte del proceso y saber qué pasos deben optimizarse o cuáles están funcionando bien.
- Visualizarás tu rendimiento. Recopilar y revisar datos puede mostrarte el rendimiento de cada departamento de tu empresa, tus empleados, la comercialización… En definitiva, sabrás si tu dinero se está aprovechando.
- Entenderás mejor a los consumidores y al mercado. Los datos permiten conocer a tus clientes reales lo que te facilitará llegar mejor a ellos.
- Mejorarás los procesos. La analítica de datos te permite realizar mejores estrategias de marketing y de ventas. Además entenderás los procesos de negocio y podrás encauzar tu tiempo y dinero de forma eficaz.
Aplicaciones del Big Data.
Vamos a ver con ejemplos concretos cómo puede aplicarse el Big Data en distintos campos del mundo empresarial:
- En la Automoción: mapas de carreteras para vehículos autónomos.
- En la Logística: orden de inventario predictivo o la verificación de la procedencia de productos y materias primaslo que posibilita una mejor trazabilidad.
- En Seguridad: protocolos de ciberseguridad y monitoreo de información en tiempo real.
- En el ámbito de la Salud: monitoreo de las condiciones de salud a través de información de wearables o planes de salud personalizados para pacientes.
- En el Transporte: herramientas de optimización de combustible.
¿Y en el Marketing?
El Big Data nos facilita la realización de campañas publicitarias personalizadas o la optimización de la reproducción de contenidos. Algunas de las aplicaciones más interesantes son estas:
- Utilizar los datos en tiempo realde forma que puedan beneficiar tanto al cliente como a la empresa gracias a la hipersegmentación.
- Mayor eficiencia en la detección de las necesidades del consumidor.
- Hacer recomendaciones de compra personalizadas con un menor margen de error.
- Mejorar el impacto de las acciones publicitarias.
- Avanzar en la automatización de procesos.
- Aumentar la productividad.
Ya lo dijo Hobbes “La información es poder” y ahora más que nunca. No te ahogues en un mar de datos y súmate al carro del Business Intelligence y la analítica. Es el momento oportuno para aprovecharte de todas sus ventajas e ir un paso más allá que tu competencia. La revolución tecnológica está aquí ¿te animas a dar el paso hacia una transformación empresarial de éxito?